
La disponibilidad de agua para riego que habrá de forma
adicional representaría unos RD$3,000 millones por año La construcción del
Proyecto Múltiple Monte Grande representa la solución a un conjunto de
problemas que por años han impactado en importantes provincias de la región Sur
del país, aseguró ayer el director del Instituto Nacional de Recursos
Hidráulicos (Indrhi), Olgo Fernández.
Una vez concluida la obra, que envuelve cinco componentes, se
prevé que habrá un efectivo control de inundaciones, una disminución de los
daños en las tierras situadas aguas abajo, la garantía de servicio de agua
potable y el incremento de la disponibilidad efectiva del agua de riego. Esta
última representaría unos 10 metros cúbicos por segundo adicionales, que en el
año serían 315 millones de metros cúbicos.
Los números que maneja Olgo Fernández indican que con Monte
Grande se generarán 2,500 empleos directos y otra importante cantidad de manera
indirecta. En el momento que la obra entre en ejecución con todos sus
componentes generaría 12,500 empleos en la región, para integrar la parte
agrícola, la de generación, la de contra inundaciones y la parte ambiental que
se va a aprovechar. “Esto, porque inmediatamente la obra esté lista se formarán
cooperativas para crianza de peces y otras actividades acuáticas. Eso está
contemplado en el proyecto”, aseguró el director del Indrhi, entrevistado en el
Almuerzo Semanal de Multimedios del Caribe. De los cinco componentes de Monte
Grande el primero se concluyó, que fue la rehabilitación y complementación de
la presa Sabana Yegua, que está lista y en servicio. Eso tuvo una inversión de
US$89 millones. Monte Grande tiene un segundo componente, que es construcción
de los sistemas de riego para las provincias Bahoruco e Independencia.
Actualmente se está en la fase número tres.
El cuarto componente es un poblado para alojar a las familias
de varias comunidades que serían afectadas por el lago de la presa. Un quinto
componente son las obras de mitigación de la cuenca baja. “Tenemos las
hidroeléctricas que se van a construir, que no están contempladas en el
financiamiento para Monte Grande”, dijo Fernández en otra parte del diálogo.
Entre las comunidades incluidas para el traslado figuran Monte Grande, que está
a un kilómetro y medio -aguas abajo- del punto donde estará la presa; Los
Güiros, La Meseta y San Simón.
Olgo Fernández acudió al encuentro con este diario acompañado
de Eliseo González, director de Planificación y Desarrollo Hídrico del Indrhi;
Quintín Rivera, coordinador del Proyecto Azua II; Leonel Duarte, coordinador de
la Unidad del Proyecto Múltiple Monte Grande, y Fernando Marte, gerente de
Comunicaciones. Duarte aseguró que hay un plan bien estructurado para reubicar
a las familias que serán desalojadas para dar paso a la obra. Se refiere a que
se realizó un censo hace un tiempo y acordado con los pobladores de todas las
demarcaciones y con autoridades eclesiásticas.
“Sin embargo, el Indrhi ha dejado claro que “siempre aparecen
unas personas que tratan de colarse”. Eso se ha evidenciado porque cada vez que
se ha hecho un levantamiento de beneficiarios aparece una cantidad más elevada
que en la versión anterior. Tanto Olgo Fernández como el staff que estuvo con
él se refirieron a dos hidroeléctricas contempladas en el Proyecto Múltiple
Monte Grande, y dejaron claro que –aunque forman parte de la obra- no están
incluidas dentro del préstamo.
El financiamiento que requerirían en conjunto las dos,
alcanzaría entre los 50 y 60 millones de dólares, calcula Olgo Fernández. “En
la oferta con Andrade Gutierrez lo que se previó fue una central hidroeléctrica
a pie de presa, pero posteriormente con el desarrollo de los estudios y los
diseños, que no estaban definidos previamente, el Indrhi se dio cuenta de la
pertinencia de que la turbinación no se hiciera en el pie de la presa, sino que
fuera una turbinación distante, explicó Eliseo González. Dijo que con eso, la
generación hidroeléctrica casi se va a triplicar y eso es un potencial que se
está creando.
“Será un aprovechamiento integral”, indica. Aseguró que habrá
la posibilidad de turbinar entre 20 y 25 metros cúbicos por segundo de agua.
Andrade Gutierrez (de origen brasileño) junto a la empresa Servinca (de origen
dominicano) conforman el consorcio Monte Grande, que es el encargado de hacer
la obra.
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos calcula que el
retorno de la inversión en el proyecto Monte Grande se daría en diez años,
porque esa obra no solo tendrá beneficios para la región “Sur largo” que
envuelve a las provincias Barahona, Bahoruco e Independencia, sino también en
la provincia de Azua. Olgo Fernández, plantea que inmediatamente la presa Monte
Grande esté lista, ya la presa Sabana Yegua (de Azua) se liberará de ser la
primera fuente de abastecimiento de agua en la zona y se podrían sacar de
circulación unas 183 electrobombas que están instaladas en la región, porque
habrá riego por gravedad y no será necesario gastar energía en ellas
despachando agua. Por vía de Monte Grande se producirán unos 18 gigavatios hora,
lo que significa que eso al año representará unos 15 millones de dólares que
servirán para reivindicar una parte de la inversión realizada. El ingeniero
Eliseo González, director de Planificación y Desarrollo Hídrico del Indrhi,
calcula que –concretamente- se recuperarían unos 150 millones de dólares de los
250 millones que costaría la presa por vía de esa generación de energía a la
que se refiere. La fecha prometida es el 30 de abril del año 2020 De acuerdo
con el calendario de labores que se lleva en la presa Monte Grande, la obra
deberá ser entregada el 30 de abril del año 2020, calcula Olgo Fernández. Se
está trabajando en ella 24 horas en varios turnos. Respondiendo a una pregunta
de Héctor Linares, Olgo Fernández dijo que producciones como las de banano,
plátano, la caña de azúcar, el tomate, la cebolla y otros tendrían un
incremento en sus volúmenes, una vez se cuenta con más agua, como resultado de
la existencia de la presa. Las estimaciones son de que habrá una incidencia
directa en unas 705 mil tareas, con el sistema de riego por gravedad, que
actualmente no existe. Olgo Fernández asegura que con Monte Grande se evitará
también la crecida del lago Enriquillo, en la provincia Independencia. El
director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y un staff de la
institución conversan con ejecutivos del periódico elCaribe. Los RD$3,000
millones que llegarían por el agua Con el componente de generación
hidroeléctrica se va a recuperar más del 60% de la inversión en Monte Grande,
calcula Eliseo González. Del lado de elCaribe, participaron en el encuentro el
director Osvaldo Santana, quien dirigió la entrevista; el subdirector Héctor
Linares; el jefe de Redacción de Apertura, Héctor Marte, y la editora de
elCaribe digital, Sandra Guzmán. A todos ellos el principal funcionario del
Indrhi les dijo que el financiamiento para Monte Grande está pautado a unos 15
años; la obra está en su fase de inicio, pues apenas tiene tres meses de
trabajo. En enero de este año, el Gobierno, a través del Indrhi, garantizó que
en 30 meses será concluida la presa Monte Grande y que esta vez el anuncio no
será como otros que se han hecho, por lo menos en cuatro ocasiones, sin que al
final se cumpla. De hecho, para entonces, le fueron entregados 30 millones de
dólares al consorcio Monte Grande, como un avance para que no detenga las
labores. Se trató de un dinero que el Gobierno lo tomó como un préstamo puente
al Banco de Reservas. Eliseo González indica que si se valora en términos
sociales y económicos, la disponibilidad efectiva de agua de riego que habrá
adicional, y eso se calcula a RD$10.00 el metro cúbico, una vez se concluya
Monte Grande, eso representaría más de RD$3,000 millones al año. “Cuando
tenemos un proyecto como este, estamos en presencia de una mina de oro”, dijo Eliseo
González.
Martín
Polanco/Tomado de El Caribe